El temple al huevo es una de las principales técnicas pictóricas utilizadas durante la Edad Media y considerada de las más luminosas y estables.
Os dejamos el proceso.
Separamos la yema de la clara.
En esta ocasión solo utilizaremos la yema .
Mezclamos el pigmento y la yema a la temperatura adecuada y con una espátula y presionamos enérgicamente sobre una superficie no porosa con una moleta.

Una vez preparada la mezcla, ya tenemos la pintura en su punto para comenzar a pintar

Mirad que bonito resultado!